Demian
Hermann Hesse
“El pájaro rompe el cascarón.
El cascarón es el mundo.
Quien quiera nacer, tiene que destruir al mundo.
El pájaro vuela hacia
Dios, el Dios se llama Abraxas"
Hablar
de Demian no es algo meramente fácil, ya que la forma en la que Hesse presenta
la obra es un tanto compleja y con esto me refiero primordialmente a los códigos
que oculta esta historia, la forma en que va desencadenado cada suceso y como
es que va uniendo a cada personaje es impresiónate.
Me
detendré a hablar primero del personaje principal, Emil Sinclair en la historia
su vida se desarrolla en un ambiente familiar tradicional bajo las bases y
creencias religiosas, una familia tradicional que predica una religión tan
radical y al margen tiende a desarrollar miembros de inseguros y que son blanco
fácil para cualquier tipo de bulling. En este caso hablo específicamente de
Emil, quien por consiguiente al estar educado de esta forma le fomentaron todas
las cosas buenas que debía hacer y bajo las que debía regirse, su familia lo
encerró en un mundo ficticio, fuera de la realidad, un mundo extremo en el que
ser bueno era lo primordial y el fin para llegar a Dios y de esta forma tener
un lugar en el cielo.
Sinclair
no había tenido contacto con el mundo exterior y es por esto que él mismo
divide su mundo y el externo llamándolo irónicamente “los dos mundos”; ya se
comentó a cerca del primer mundo, donde radica el bien y la buena educación, en
donde se siguen los mandatos de Dios y se ´predica todo lo que dicte la biblia.
Al salir de aquella protección que sus padres sin querer habían formado en él,
se encontró con el mundo externo, el mundo al que no pensó pertenecer nunca, al
que desconocía por completo y por el cual debía andarse con cuidado, por que
era el mundo real, lleno de cosas buenas y cosas malas y es aquí en donde
tropieza con lo que aterrorizará su infancia, con lo que marcará su vida
completamente y que hará que él comience a caminar sobre el sendero para llegar
a sí mismo.
Es
justo aquí cuando la afortunada o desafortunada presencia de Franz Kromer hace
una ligera o estrecha unión entre Sinclair y el “otro mundo”. Sinclair siento
un niño de casa y de bien, se da cuenta que no sobre sale de ningún modo en el
mundo externo, aunque en el mundo de su familia ser bueno y obediente le diera
créditos, estos créditos no tenían valor alguno en otro mundo, mas sin en
cambio el otro mundo lleno de perturbaciones y acontecimientos malévolos, lo
llamaba a unirse un poco a él y de esta forma fue como Sinclair invento la
historia que le traería consigo semejante desgracia por un prolongado tiempo.
Sinclair
invento una historia a cerca de un robo; con esto quiso hacerse participe de
este mundo desconocido, pero al desconocer de él no supo que traería consecuencias.
Kromer era un niño criado bajo este mundo turbulento, sabía perfectamente a
cerca de lo bueno y de lo malo y esto traía gran ventaja sobre Emil, sabía que
esa historia era mentira y por esta razón quiso aprovecharse de la situación.
Por mucho tiempo sometió a Emil bajo amenazas y golpes, advirtiéndole que lo
acusaría a las autoridades por el robo que se había inventado. Sinclair era un
niño ingenuo, inseguro e indefenso quien creyó en esta posibilidad y por nada
del mundo defraudaría a sus padres quienes jamás le habían fomentado seméjate
hazaña así que Sinclair decidió continuar bajo la amenaza de Kromer.
Su
mundo había cambiado por completo, Sinclair jamás había vivido con un miedo
parecido en el mundo de salvación que había vivido ese miedo no tenía lugar, su
vida había dado un giro impresionante a partir de ese suceso. La angustia y el
miedo bajo el que vivía lo había transformado no solo emocionalmente, sino
también físicamente y su familia lo notaba, comenzó a robar en su casa, a
mentir; comenzó a romper todas las reglas bajo las que había sido educado y eso
era lo que más le frustraba. Cada vez veía alejarse más y más de la
tranquilidad a la que había acostumbrado vivir.
Sinclair
jamás imagino que su vida cambiaría por completo al encontrarse con el
personaje más importante de la historia: Max Demian. Su primer encuentro con Demian es la clase de
religión de la escuela, a Sinclair le llama la atención la seguridad que
desprendía, esa atracción que Sinclair sentía por Demian era se debía a que desconocía
de ella y por eso le atraía, Sinclair era inseguro y la seguridad de Demian le
atraía por que carecía de ella.
Demian
formaría parte esencial en la formación de Emil Sinclair, le ayudaría a
encontrarse, sería su guía de aquí en adelante. Demian despertó en Sinclair
aquello llamado pensamiento y que no todos desarrollan, despertó su conciencia
y aquella inquietud de cuestionamiento en los temas impuestos por la sociedad.
Sinclair
comienza este tipo de análisis con Demian en su clase, cuando su profesor
comienza a hablarles de Caín. La religión es un tema impuesto por la sociedad,
en la que nos enseñan a no cuestionar absolutamente nada, es la palabra de Dios
y uno debe seguirla ciegamente. Demian tiene un poder analítico impresionante,
que siempre deja boquiabierto a Sinclair quien jamás imagino que un alumno
cuestionara la religión, tenía su interpretación a cerca de los sucesos
religiosos y no sólo lo hablaba al aire, tenía un sustento razonable de lo que
hablaba. Sabemos que la religión tiene muchos secretos escondidos y que de esta
forma mantienen enajenada a la gente, la mantienen controlada en muchos
sentidos, pero el simple hecho de poner en duda cualquier afirmación de la
iglesia está liberando en el interior muchas de las cuestiones represivas a las
que el sistema nos tiene sometidos y es justo esto lo que Demian pretende
enseñar a Sinclair, a no dejarse guiar por lo primero que le digan, a creer que
pueden existir más interpretaciones de cualquier tema que siempre debe
preguntarse más allá de lo que crea que su mente llegara, el pensamiento y la
conciencia es la liberación del alma.
Sinclair
siempre escuchaba atento a lo que Demian tenía que decirle, sus palabras eran
tan razonables que creaban la duda dentro de él. Y es aquí donde Sinclair comienza
a darse cuenta de lo vació que estaba en una familia como la suya, de todo lo
malo que le causo ser criado bajo una educación tradicional y reprimida. Iba en
busca de él mismo y Demian era el guía perfecto para este trance, poder emitir
una opinión acerca de la religión le resultaba muy interesante y fuera de lo
común, Demian sabía exactamente de lo que hablaba y a donde se dirigía, jamás
lo vio actuar como un colegial, ni hacer bromas, ni comportarse inmaduramente;
había algo en él que transmitía la madurez de un hombre y eso llamaba
intensamente la atención de Sinclair.
La
educación que se recibe en la familia es la que definirá el carácter y el lugar
que ocuparemos dentro de la sociedad y de eso se estaba percatando Sinclair con
forme iba creciendo, se iba despertando algo en su inconsciente que no cualquiera
desarrolla: la conciencia.
Demian
siempre lo ponía a prueba, le planteaba situaciones que quizá jamás había pensado,
le enseño como es que la seguridad abría las puertas que se creían imposibles
abrir y como de esta forma se podía manipular a las personas a favor propio.
Sinclair aprendía cada día de la personalidad de Demian, su postura su manera
de hablar, su mirada que radiaba seguridad y muchas otras cosas que se
destacaban en él.
Demian
cuestionaba cualquier tipo de tema, defendió al uno de los ladrones presentados
en la Pasión de Cristo, hacia resaltar la valentía de uno de ellos al mantener
firme si decisión de ser ladrón ya que era muestra de un carácter firme y
formado. Por el otro lado estaba “el mal ladrón” que en los últimos momentos se
arrepintió aludiendo así la falta de seguridad que había tenido a lo largo de
su vida, es absurdo que se haya llevado una vida de crímenes en la que quizá
salieron perjudicados terceros y al momento de pagar las consecuencias venga el
arrepentimiento.
En
el camino por encontrarse Sinclair se cruzó con algunas personas que
intervinieron en su crecimiento, se dice que a veces hay que caer para
encontrarlos y justo le paso cuando se encontró con Alfonso Beck. Cuando Demian
desaparece de su vida por un rato, Sinclair se siente perdido, solo y comienzan
a llegarle miles de pensamientos absurdos a su cabeza que por alguna extraña
razón hacen que extrañe inmensamente a Max Demian y aquí es donde aparece Alfonso;
es un estudiante dos años más grande que él y es uno de los jefes y líderes de
la escuela quien muestra a Emil un lado oscuro de en sí mismo. Al empezar a
juntarse con este joven, Sinclair da una vuelta por las tabernas, lugar en
donde los jóvenes acostumbraban ir a beber, en esta etapa de soledad y de
perdición el alcohol es su único gran amigo, encuentra cierta satisfacción al
inmiscuirse en este ambiente.
En
el fondo de su ser gritaba desesperado por la aparición de Demian, necesitaba
de él y de sus acertadas palabras para poder seguir. Así como para muchos el
enamoramiento es una perdición, para Sinclair resulta la salvación de esta vida
obscura. Su primer encuentro con una chica, las primeras sensaciones que se
presentaban en su cuerpo a la presencia de un ser del sexo femenino lo
inmovilizaron, un día la vio pasear por la calle y enmudeció. Jamás se acercó a
ella, nunca cruzo palabra alguna; pero la confirmo con el nombre de “Beatrice”.
Este
enamoramiento repentino, platónico e irónico le trajo muchos otros pensamientos
extraños, no podía dejar de pensar en aquella mujer, por las noches la soñaba y
en el día la pensaba todo el tiempo. Hasta que un día decidió dibujarla para
permanecer con una imagen material de ella, tras varios intentos consiguió un
resultado que le pareció conveniente, pero tras analizar las características de
este retrato no tardó mucho en darse cuenta de a quien se parecía la persona de
este retrato; a pesar de ser el retrato de una joven Sinclair reconoció en ese
retrato a Max Demian, era tanta la conexión entre estos personajes que el
inconsciente de Sinclair podía dibujarlo de memoria, jamás se desprenderían uno
del otro, siempre existiría algo que los uniera y en este caso era un retrato
en el que Sinclair pretendió representar a una mujer que en realidad era ni más
ni menos que Max Demian.
Sinclair
no podría seguir por ese sendero solo y no tardó mucho en encontrarse con
Pistorius quien sin querer se convirtió en otro de sus guías en ausencia de
Demian. Pistorius era el organista de una iglesia y no sólo eso, había
estudiado algo de Teología fue con él con quien descubrió uno de los mensajes
que Demian le había enviado: “El pájaro rompe el cascarón. El cascarón es el
mundo. Quien quiera nacer, tiene que destruir al mundo. El pájaro vuela hacia
Dios, el Dios se llama Abraxas".
Era
la clave para encontrarse, antes debía salir del cascaron y ya llevaba mucho
camino por delante, pero se preguntaba ¿quién era Abraxas? Y justo esto le
enseño Pistorius, Abraxas era el Dios perfecto, quien estaba lleno del bien y
del mal, era un equilibrio para la humanidad, evidentemente era un Dios de
alguna subcultura, las otras religiones lo prohibían, ya que se decía que era
una unión con el diablo. Pistorius le mostro los secretos que debía saber
acerca de Abraxas ya que era la clave para algunos de los pasos que le faltaba
por recorrer. Le mostro que hay cosas en los sueños que nos dan mensajes y esto
despertó la curiosidad de Sinclair ya que tenía un sueño en particular que se
repetía. Soñaba con una mujer que tenía algunos rasgos de Demian a él le
parecía un tanto confuso y en ese momento no entendía en por qué de ese sueño,
pero siempre lo mantuvo presente.
Pistorius
le enseño a seguir sus convicciones y de esta forma aprendieron demasiado uno
del otro. Le enseño que cuando odiamos a un hombre, odiamos algo que se
encuentra en la imagen propia. Cuando Sinclair escucho estas palabras se quedó
mudo, no tuvo absolutamente nada que decir. Pistorius había tocado algo en su
interior que sólo Demian había podido hacer y esto le paralizo el alma.
A
pesar de tener este encuentro, Sinclair jamás dejo de pensar en Demian, siempre
y donde se dirigiera iba su sombra con él, existía una conexión que en ese
momento no se explicaba, lo extrañaba todo el tiempo y no sabía la razón. Al
encontrarse con una foto de Demian en la que salía con su madre, Sinclair se
dio cuenta que era la mujer de sus sueños, por esta razón relacionaba de tal
forma a Demian, era una marca la que los distinguía, él no la conocía y jamás
la había visto y no se explicaba cómo era que la soñaba repetidas veces.
Un
día que Sinclair iba caminando sin rumbo, a lo lejos escucho una voz conocida y
al irse acercando tuvo por sorpresa que era Demian, su emoción fue inmensa, lo
único en lo que pensaba al saberlo cerca es que podría encontrar a su madre a
través de él. Había surgido un enamoramiento inesperado y extraño.
Cuando
Demian se percató de la presencia de Emil se dirigió a saludarlo, fue un
encuentro mutuamente grato, platicaron de la infancia, de los acontecimientos
que les venían de tras, de la escuela, se pusieron al corriente en cuanto a sus
vidas y actividades.
Demian
le dijo a Sinclair que su madre lo esperaba, estas palabras le paralizaron el
corazón y quiso verla en ese instante, a pesar de sus ganas se contuvo y es
pero hasta el día siguiente para tan deseado encuentro.
Frau
Eva quien era la madre de Demian, era una señora que se mantenía joven,
desprendía la misma seguridad y madurez que su hijo, definitivamente no parecía
su madre. Cuando Sinclair tuvo su primer encuentro con Eva, no supo que decir,
era más hermosa que en su sueño, nunca pensó que se enamoraría de la madre de
su mejor amigo, de su guía. Charlo por un tiempo prolongado, la suavidad de su
voz, la maternidad en ella le eran impresionantes.
Desde
este momento Sinclair no se separaría de nuevo de Demian, había una razón lo
suficientemente fuerte para no hacerlo: Eva. Pasaron horas hablando de
infinidad de temas, Demian pudo notar la evolución en el vocabulario de
Sinclair juntos entendieron que las barreras no existían entre los seres
humanos, lo único que nos separaba unos de otros era la forma de ver las cosas;
cada persona percibe las cosas de manera distinta y esto se define por medio de
la educación que se nos proporciona. Si vivimos en un mundo cerrado en el que no
existe la apertura de ideas y de pensamientos, siempre viviremos encerrados en
ese mundo ficticio, ese mundo que nos formó nuestra familia y justo Sinclair
había aprendido esto; que la educación que nos fomenten nuestros padres es un
camino; pero siempre hay que probar otros que pueden ser mucho mejores en
nuestro desarrollo como seres humanos.
Demian
veía triunfante a Sinclair, lo que se había propuesto como siempre estaba a
punto de lograrlo. Había una señal en Sinclair que ni él sabía que tenía y por
esta razón Demian se acercó. Su mundo era tan reducido, a lo largo de los años
Sinclair se había encontrado con tan pocas personas que lo entendían, unas se
volvieron a alejar como Pistorius, ahora sólo le quedaba Eva y Demian que eran
los únicos con los que podía comunicarse realmente, eran los únicos que lo
entendían y quienes podía aportarle algo nuevo.
Sinclair
mostraba su interés por Eva, quien en una ocasión le explico que cuando un
hombre desea algo debe desearlo con todas sus fuerzas y con todo su ser para
poder obtenerlo y ella notaba que en él el deseo de tenerla no era tan inmenso
como para que ella se sintiese atraída, había algo de miedo en su mirada; por
mucho que deseara estar con ella había algo que al mismo tiempo la alejaba.
Con
esto Sinclair decidió poner todo su ser en su deseo por obtenerla y a veces la
vida es injusta. Demian había tenido algún tipo de visiones, nunca les había
prestado tota atención hasta que en el momento que Eva había sentido el llamado
de Sinclair, justo en ese momento Demian descubrió el origen de sus sueños. La
guerra se acercaba y en tendría que ir al frente y de tras de él Sinclair. Era
absurdo que después de pasar por tantas cosas, después de encontrar al amor de
su vida el destino jugara con su vida de esta manera.
En
efecto la guerra estallo y como visualizo Demian fue el primero en marchar, le
preocupaba el echo de matar seres humanos, era lo que más le aterraba de la
guerra, pero sin poder hacer algo empaco sus cosas y se macho. De tras de él
Sinclair tuvo que enlistarse, una noche comenzó a recordad todos aquellos
momentos que vivió con Demian, lo representante e importante que fue en su
vida, lo vio irse como una llamarada. A sus memorias acudió Frau Eva, quien
invadió la mayor parte de su cabeza, estaba completamente viviendo sus sueños
recordando y volviendo a experimentar sensaciones del pasado.
En
medio de todo esto cayo una bomba cerca de él, ni siquiera la vio venir a causa
de sus pensamientos profundos. Sentía que algo dentro de él lo arrastraba, era
como si en destino dispusiera de él para llevarlo a algún lugar en cual
desconocía y no entendía con exactitud para qué lo llamaba.
Una
tarde llego a un cuarto, lastimado y lleno de sangre, apenas si podía moverse
pero su conciencia estaba intacta, miró a su costado y junto a él estaba la
imagen de la salvación de muchos de sus días; Demian, lastimado de igual forma
que él, ´pero aún más grave, moribundo y apenas si hablaba. Emitió unas
palabras antes de irse, le recordó el sucedo que nunca se había mencionado,
Kromer y le hiso saber que debía marcharse, pero antes de eso quería recordarle
que siempre estaría con él, tal vez no físicamente, pero siempre estaría con
él. Siempre lo defendería contra cualquier Kromer que se interpusiera en su
camino. Demian dio a Sinclair un beso que Eva había enviado para él si las
cosas se ponían mal, aquel beso lo perdió en un sueño inmenso y a la mañana
siguiente se dio cuenta que el cuerpo que estaba a su lado no era en de Demian.
Siempre
recordaría este sucedo, ya que había perdido no sólo a un amigo, sino a un
guía, un hermano. Siempre que se sintiera perdido solo bastaba con mirar dentro
de él para encontrar ahí a Max Demian, quien lo había ayudado a encontrarse y a
comunicarse no sólo con palabras, sino también con el alma y esa enseñanza
nunca nadie más se la daría.
Y es
así como después de tan interesante aventura Sinclair llega al Nirvana y se
encuentra con su YO interno, la ayuda de Max Demian fue primordial en esta
búsqueda y Demian quedaría intocable dentro de él.
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